Discos Zeppelin. Para los amantes de la música y coleccionistas de todo el mundo

JUNTO A SU 1º ALBUN TAMBIEN ES UNA PIEZA SIEMPRE MUY BUSCADA POR TODOS LOS QUE AMAMOS EL SUREÑO Y LA MUSICA AMERICANA

GRUESA CARPETA, VINILO EN MUY BUEN ESTADO

GENIAL 2º ALBUN DE LA BANDA ,SIN DUDA LA MEJOR Y MAS GRANDE BANDA SUREÑA DE TODOS LOS TIEMPOS Y UN DISCO QUE ES LA BIBLIA DE ESTE GENERO..!!

En los inicios de este súpergrupo era curioso constatar lo bien repartidos que tenían cada uno sus roles. Duane Allman era el líder y guía espiritual del grupo pero curiosamente sólo se ocupaba de una parte de las guitarras y no de la composición, cosa muy extraña en aquella y en todas las épocas (que yo recuerde solo otro súperguitarrista como Jeff Beck le ocurría lo mismo respecto a lo de componer).

Su hermano, el jovencísimo Gregg, era el vocalista y compositor de la mayor parte de los temas. A Dickey Betts, por su parte, además de ser guitarra solista también se le daba bien la composición (aún no se atrevería a cantar, pero ya llegaría) como empieza a demostrar en dos temas de este disco: "Revival", que es un tema con una mezcolanza extraña de estilos entre jazz, country y coros gospel e "In memory of Elisabeth Reed", que está dedicado a una señora enterrada en el cementerio de Macon que visitaban bastante estos macabros chicos (para ensayar).

Desgraciadamente pronto Duane y Berry estarían más estrechamente ligados con la dama. Es un tema que se hizo muy popular a pesar de la mezcla jazz-blues rock en que está realizado.

En este trabajo se ve ya con claridad su querencia hacia las raíces del sur, en particular en el sensacional "Midnight Rider", con ese magnético riff de guitarra acústica y los melódicos solos de Dickey y Duane, cada uno en su estilo. "Please Call Home" es un tema lento que se puede asociar tanto al southern rock como a esas grandes baladas soul de los 60. Incluso en "Leave My Blues At Home" se puede apreciar esos aromas del sur, pese a ir hacia al blues-rock, el hecho de incluir el piano hace que el sonido se note más caliente.

La versión de "Hoochie Coochie Man" que se marcan es realmente de impresión. Aquí el encargado de las partes vocales es el bajista Berry Oakley, y la verdad es que ese forzamiento de voz (no se si provocado o que realmente no llegaba a más) queda extraordinario.

Dejo para el final esa maravilla llamada "Don't keep Me Wonderin'", con ese inicio aullante de las dos guitarras, el potentísimo y físico ritmo que imprimen los baterías y el bajista. Punto aparte para el trabajo de guitarra de Duane Allman, ese solo final pone la piel de gallina al más pintado. Para mí, sólo con esta canción y con esos encajes de slide guitar que acomete en ese clásico que es Layla, del trabajo de Derek Clapton y los Dominos que también apareció en ese año, se tiene justamente bien ganada la leyenda.

Para muchos este es su mejor trabajo (para mí el segundo, el primero fue el de debut) todo una declaración de los principios musicales que iban a utilizar los próximos 35 años. Además, hay también canciones increíbles, ¡qué más queréis!